Noticias

Guillermo Herrero presenta en Nieva el sexto volumen de ‘Una mirada al ayer', colección publicada por la Diputación

La colección, editada por el Instituto de la Cultura Tradicional Manuel González Herrero, comenzó en 2013 con el deseo de la institución provincial de recopilar la intrahistoria local de los pueblos segovianos a través de imágenes

12 julio 2019 Guillermo Herrero presenta en Nieva el sexto volumen de ‘Una mirada al ayer', colección publicada por la Diputación
Hace exactamente un mes, el periodista Guillermo Herrero llenaba el salón de Plenos de la Diputación en la presentación del libro ‘Rostros de la trashumancia', publicado por el Instituto de la Cultura Tradicional Manuel González Herrero. Y sin apenas tiempo para disfrutar de los elogios y comentarios que ha recibido esta publicación, que supone un reconocimiento para la cultura pastoril y recoge el testimonio de distintos pastores de la provincia, el también historiador presenta mañana, sábado 13 de julio, a partir de las 13:00 horas en el salón de cine de Nieva, el sexto volumen de ‘Una mirada al ayer', la colección puesta en marcha por la Diputación en 2013 con la intención de recopilar la intrahistoria local de los pueblos segovianos a través de la entrega de antiguas imágenes, en su mayoría cedidas por los vecinos.
 
De este modo, y tras los monográficos dedicados a Santa María la Real de Nieva, Aguilafuente, Prádena y Valtiendas, de los que se encargó el también periodista Luis Besa, y de aquel sobre Riaza, el primero del que se hizo responsable Guillermo Herrero, ha sido publicado este sexto volumen en el que, según revela Herrero, "el pueblo de Nieva se ha volcado y me ayudado muchísimo; empezando por su alcaldesa, Marisa Gorgojo".  Tal y como cuenta Guillermo Herrero, la alcaldesa, quien estará mañana en la presentación, acompañada de la diputada en funciones del Área de Cultura y Juventud, Sara Dueñas ?a quien el periodista también dedica elogios y agradece la confianza?, ha contribuido de forma notoria a que los vecinos se hayan puesto a disposición del autor para prestar imágenes y testimonios.
 
"Ha habido muchísima participación vecinal", confiesa el periodista, destacando que la mayor parte de las entrevistas que han servido para contextualizar la obra han sido realizadas "a personas de entre setenta y ochenta años que recordaban episodios históricos". Según el autor, especialmente significativo es el de un incendio que tuvo lugar al final de la Guerra Civil y que arrasó cerca de medio centenar de casas.
 
Para Herrero, si hay algo que diferencia este volumen del primero que escribió para esta colección sobre Riaza, es fundamentalmente el toque más histórico que tiene, respecto al resto de publicaciones, que cuentan con una visión más etnográfica de los municipios protagonistas. "De Riaza había un montón de libros de Historia, pero en el caso de Nieva no había ningún libro escrito sobre este tema; tenía la impresión de que no se debía desaprovechar la oportunidad", explica Guillermo Herrero, quien, no obstante, se resta mérito y asegura que "no deja de ser un libro gráfico que tiene un complemento literario". "Se cedieron alrededor de 500 fotos, que son muchas y además son bastante buenas, principalmente en blanco y negro; en base a ellas yo he tratado de dar el contenido al libro", añade el escritor, datando las imágenes principalmente en las décadas centrales del siglo XX.
 
Por otra parte, y en lo que respecta a la estructura del libro, el autor lo divide en seis capítulos diferenciados que abordan los apuntes históricos, la evolución del paisaje del municipio, el ciclo vital de la localidad, una mirada cotidiana a los oficios antiguos de Nieva, el ciclo festivo tradicional y aquellos nevatos 'de pro' que han contribuido a dar a conocer a nivel nacional e internacional el nombre del municipio.
 
Asegurando que en este libro ha invertido más horas de documentación que en el anterior, y agradeciendo la ayuda de Isabel Álvarez en el Archivo Municipal de Segovia y de una amiga francesa que le ha ayudado a traducir algún texto escrito en este idioma, Guillermo Herrero destaca de los primeros capítulos el papel de los monjes Jerónimos de Santa María del Parral en la viticultura de la tierra o la relevancia que tuvo la industria en el municipio en los siglos XIX y XX. "A día de hoy Nieva parece un pueblecito pequeño, pero en un determinado momento llegaron a existir siete fábricas de aguardiente en el siglo diecinueve o una de elaboración de resina y otra de chocolate en el veinte", apunta el autor de la publicación, quien también califica de "llamativo" cómo en el capítulo dedicado al ciclo festivo se narra que en 1729 el Concejo dio seis reales a las mujeres de Nieva para que celebraran la festividad de Santa Águeda. 
 
Por otra parte, en opinión de Guillermo Herrero, "se hacían cosas raritas en algunas épocas" y cita como ejemplo el hecho de que "cuando había plagas de langosta o de pulgón en los campos era frecuente, en muchos sitios de España, esparcir el agua de San Gregorio, que se debía de conseguir en una basílica de un pueblo de Navarra". Risueño, cuenta cómo en pleno siglo XVIII al Ayuntamiento no se le ocurrió otra cosa que mandar a un vecino a por este agua bendito.
 
Estas anécdotas y otras curiosidades históricas que Guillermo Herrero desvelará mañana en la presentación del libro, están recogidas en una publicación que no olvida mencionar a aquellas personas de la localidad, o muy vinculadas a ella, que han hecho de Nieva un nombre que no suena extraño en distintos ámbitos territoriales y sectoriales. Así, por ejemplo, en el capítulo dedicado a los nevatos 'de pro' se recuerda a Florentino García Salgado, al actor Pablo Sanz Agüero, relativamente conocido en los comienzos de la televisión en Segovia o al que fuera senador del PP que falleció en un accidente de tráfico, José María Herrero, sobre quien Guillermo Herrero explica que "aunque no era natural de allí, muchos vecinos coinciden en señalar que fue la persona que consiguió revitalizar los viñedos de Nieva".
 
A través de este nuevo volumen de la colección ‘Una mirada al ayer', la Diputación y el Instituto de la Cultura Tradicional esperan que estas imágenes y estos recuerdos de quienes han habitado el municipio en las últimas décadas permitan revivir y reconstruir momentos y épocas que han ido asentando las raíces de toda la provincia.